Ese momento en el que un cachorro llega a casa es algo que nunca se olvida.
Es una situación especial que nos llena de alegría, pero debemos ser conscientes de que su adaptación es un proceso, por lo que te damos algunos consejos para que sea más rápida y sencilla.

El momento de la llegada probablemente será difícil para el cachorro porque estará confundido y desubicado, lo que conllevará que se muestre miedoso. Ante esa situación, recomendamos dejar que explore y conozca su nuevo hogar tranquilamente, de forma que se vaya adaptando poco a poco. Otro consejo es que si en casa ya vive otro animal, mejor presentarlos más adelante.
En cuanto a su lugar en la casa, la mejor opción es que tenga un lugar propio solo para él, donde se sienta seguro, tranquilo y cómodo. Para conseguir eso, puedes crear un rincón acogedor donde no haya muchos ruidos ni malos olores.
Ahora, como sabemos que las primeras veces pueden ser un poco abrumadoras, hablaremos sobre algunas de ellas.
Su primera comida.
Una de las cosas más importantes que debemos saber es que el alimento que le demos debe estar adaptado a la edad del cachorro y lo ideal es que sea muy apetitoso y de fácil digestión.
Cuando nos entreguen a nuestro peludo, podemos pedirle a la persona que lo haya hecho que nos dé un poco del alimento que haya estado consumiendo hasta el momento, de forma que puedas realizar un cambio gradual de alimentación una vez hayas decidido qué tipo quieres darle (alimentación natural, alimentación comercial, etc.)
Su primer juguete.
A los cachorros les encanta jugar y gran parte del día lo pasan así, por lo que hay que ofrecerles juguetes, pero tienen que ser adecuados y, sobre todo, seguros.
Los primeros deben ser muy resistentes pero suaves a la vez, porque van a jugar mucho, pero queremos evitar que se dañen sus dientes.
Si buscas algún ejemplo podemos recomendarte algunos naturales como cuerdas de algodón o juguetes de caucho.
Su primer baño.
Puede ser que el cachorro esté muy sucio a su llegada. Si ese es el caso, usa un champú adecuado para cachorros y presta especial atención en el secado. Es muy importante secarlo bien para evitar que se enfríe y enferme.
Si el cachorro no está muy sucio y quieres evitar un baño tan pronto, puedes limpiarlo con toallitas húmedas especiales para perros o champú de limpieza en seco.

Su primera visita al veterinario.
Esta primera visita es muy importante y no debes dejarla pasar. El veterinario realizará una revisión del estado de salud general de tu peludo y le aplicará las primeras vacunas y los primeros tratamientos para parásitos internos y externos. Además, establecerá el plan de vacunas y antiparasitario a seguir.
No olvides mantener una constancia con las visitas al veterinario y acudir regularmente para que esté sano y feliz.
Con todos estos consejos, estás más que preparado o preparada para tener un cachorro y disfrutar del tiempo juntos.